miércoles, 6 de enero de 2016

2016.

Correo electrónico.
29 de Diciembre 2015. 

Todo es cíclico, desde los procesos químicos, físicos, este universo y
aparentemente, la vida misma. Y  aquí estamos, viviendo una existencia
cíclica y redundante, de nacer, crecer, reproducirmos, como podamos
y quien podamos, para finalmente; Morir. En un ciclo, que se a
repetido incontables veces y del cual, todos o seres vivos de la
creación, incluido el hombre, somos una parte inevitable. Existen
también, los ciclos mas grandes, los cósmicos, esos, que son medidos
en escalas de tiempo difícilmente comprensibles para nuestros cerebros
de simio venido mas, como los siglos, eones y años luz.
Así pues, aparentemente, si el calendario y las
estrellas del cielo, y el ciclo repetitivo de las estaciones no me
engañan, otra vez nuestra Madre Tierra, pétrea nave espacial mas ancha
en el ecuador y achatada en los polos, a dado una revolución mas
alrededor de ese centro gravitacional tiránico que es el Sol. Así
pues, un ciclo mas de trescientos sesenta y cinco días, con sus noches
incluidas, a concluido y un año mas a terminado. Año este, terrible,
como lo han sido muchos. Lleno de muerte, desgracias, destrucción y
desesperanza. Un año, que no hace mas que indicarnos que el próximo
año que vendrá lo será terrible también, lleno de dolor, injusticia,
sufrimiento e incertidumbre. Parecería estúpido de mi parte que ante
el escenario mundial actual yo pudiera desearte un buen año próximo y
un feliz comienzo de este nuevo ciclo alrededor del Sol. Pero, así es,
tal vez soy estúpido, pero creo, que en donde hay vida hay esperanza.
Así pues te deseo un buen año, y que en el próximo ciclo que se nos
deja venir encima, como bestia acechante encuentres momentos de paz y
alegría, que  puedas disfrutar de momentos de calma y de dicha, estos
siempre fugaces pero, de un valor inmenso, que descubras y
experimentes de la solidaridad de los demás en los tuyos y de la que
puedes prodigar a los demás, de momentos de descubrimiento y de auto
aceptación. Por ultimo deseo que en tu vida, los momentos y elementos
positivos sean los mas, o que sean tan trascendentes que eclipsen a
esas pequeñas desgracias diarias que se empecinan en aparecer en la
vida.

Y ahora te dejo, pues siento como esta bola de piedra empieza su caída
hacia el Sol, a ese, que tendremos cerca, en nuestro punto mas bajo de
la órbita elíptica dentro de seis meses. Te invito a caer, en una
larga trayectoria paralela a este esferoide que compartimos junto con
otros seis mil millones de sres, humanos. Quien sabe, tal vez en un
futuro nuestras trayectorias se junten, tal vez:Colicionemos.

La mejor de las suertes en esta aventura que empieza y que llamaremos,
de ahora en adelante dos mil diez y seis.